¡Qué empacho de Izquierda!

 

 

Diario IDEAL, 4 marzo de 2015

Desde que Podemos irrumpiera en el panorama nacional, toda la información política de España ha pasado a girar entorno a este grupo, sin representación parlamentaria, que ya se ha erigido como salvadores de la patria obrera. Vienen y gastan la misma hiperlegitimidad que toda la Izquierda española frente a los que no lo somos. Se muestran prepotentes, se creen superiores y hasta gozan del perdón divino y humano, tal y como afirma el nuevo prohombre de Izquierda Unida, el señor Garzón que ha llegado a afirmar que ‘un delincuente no puede ser de izquierdas’. Oyendo, viendo y sintiendo todo esto a mi alrededor afirmo: estoy hasta los mismísimo huevos de la Izquierda española. Estoy hasta esa parte de mi cuerpo porque juzgan y prejuzgan que los que no lo somos; somos delincuentes, tiranos, dictadores, explotadores de trabajadores, especuladores y toda esa parafernalia ideológica casposa y pasada de moda que les hace ser poseedores de la verdad absoluta, de controlar el orden social perfecto y que son sólo ellos, los que son de Izquierdas, los que permiten y poseen el don de que nuestros hijos estudien en el mejor sistema educativo del mundo, nadie pague impuestos, todos los jóvenes que lo deseen puedan trabajar, que no existan los despidos, que todos los que sean trabajadores estén afiliados a sindicatos, que los empresarios estuviéramos nacionalizados, que los más ancianos tuvieran pensiones mil millonarias y que nadie pagara un duro por una pastillica.

Y es que agotador tener que soportar a diario estas lecciones de supremacía ideológica. Y este año, aún más.

España en esto y como en otras cosas es un país enfermo, esquizofrénico, donde se te cataloga por la ideología en vez de por tus méritos. Suponemos que Garzón, el de IU, llevará en su programa electoral un cambio en el Código Penal que cuando se hable de la exención de la responsabilidad penal no hablará de los menores, enajenados o los demás tipos recogidos en el texto sino que directamente dirá:’no son delincuentes aquellas personas que, habiendo cometido una falta y/o delito, sean o se declaren de Izquierdas. Para ello bastará negar la bandera constitucional y, no necesariamente por este orden, saberse la Internacional, recitar de memoria el himno de Venezuela, saber la vida de Fidel Castro, enumerar por orden todos los secretarios generales del partido comunista de la Unión Soviética, saber el nombre de la esposa de Kim Jong Un, o acreditar por acción u omisión, ante el juez instructor, que se es de Izquierdas de verdad. Serán válidas como pruebas y que determinarán la puesta inmediata en libertad del ‘no delincuente de izquierdas’, firmar de su puño y letra afirmaciones como: vosotros los jueces sois los terroristas; Estado asesino; No pasarán; presoak kalera; Sí se puede; revolución o muerte; con mi vagina hago lo que yo decida; banqueros, machistas sois unos fascistas; la educación es del pueblo; sanidad, pública y gratuita; el campo para quien lo trabaje; Mercadona es de todos; el dinero público no es de nadie; derecho a una solución habitacional; yankees, go home; España, mañana, será republicana; No a la guerra;  universidad pública, libertaria y asamblearia. Y todo aquello que el ‘no delincuente de izquierdas’ quiera añadir de su propia cosecha y que deje fehacientemente acreditado que es de Izquierdas. Por supuesto se admitirá como prueba una declaración de asco hacia los judíos, los norteamericanos, Merkel, los bancos, los empresarios, la Iglesia católica y todo lo que represente a la ‘no Izquierda’, según el leal saber y entender del ‘no delincuente de izquierdas’. Por supuesto podrá miccionar en el estrado ante el juez instructor, como señal inequívoca de su izquierdismo’.

La verdad es una paranoia agotadora glosar a esta suprema ideología. Sin embargo, pasa a diario. Sí, a cada segundo, hay algún iluminado/a que nos restriega por las narices lo superior que es a mí (intelectual, social y moralmente) porque es de izquierdas. Lo mierda que soy por no serlo. El asco que le doy. Las ganas que le dan de exterminarme por ser del poder opresor que está en la azotea de los ricos y no en la cochera de los pobres. Y así ‘every fucking day’ con la connivencia de unos medios de comunicación que se han convertido en la escupidera de todos estos hipócritas.