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2009Pasión
Dos palos atravesaban la habitación. Marlène Grey usaba su tanga mientras pensaba en meterse con sus cuatro leones en el circo mediático de cada día. Sin embargo, una de las canciones de Andrés Calamaro, se lo impedía. Pensaba en ese nombre que Piedrahita dejaría escrito con un pincel en la curvatura de sus braguitas.
-Al final todo es sexo- afirmó la Venus Rubia.
El espejo le devolvió un reflejo borroso donde en lugar de cuatro leones sólo había dos, con unas pelotas enormes. El Rey se había bajado los calzoncillos para tirar por la ventana – o defenestrar- al Duque. Carrillo jugaba al escondite inglés con Felipe y Guerra, mientras Javier Marías disertaba sobre lo bien que lo hablamos los andaluces, le pese a quien le pese.
Pensaba Grey: Es la pasión de una lectura sosegada de un país semanal ahora que ya se crucifican a todo tipo de seres.
¿Vivos?
*Foto: Ramón Martínez
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