Al calor del dinero

¡Échale más dinero al fuego María  que total pa´ calentarnos que más da un puñado de euros con los que los ricos se ensucian el culo y creen limpiarle la cara a los pobres!

¡No ves María que con los euros hay gente que sufre por tener castillos en el aire y sus calzoncillos están roidos por los cuescos que se tiran!

María ¿te has dado cuenta que los euros no ayudan a ir al supermercado y comprarse un jabón para la caspa? ¿ni por supuesto un crecepelo o un libro de dietas?

María, baja ya.

La lumbre se apaga y hay que avivarla con la envidia del que no tiene euros, como nosotros, pobres pero libres, y los que tienen, pero que no tienen, y sufren por tenerlos aunque sean guarros, feos y no se la vean desde hace años.

María, qué calorcito da la lumbre de euros.

¡Que ardan los euros!

Escrito por Fernando R. Ortega -Vagamundos- a las 23:31

Hay 2 comentarios de este artículo

vagamundos
Querido amigo Antonio.
Tu inteligencia te hace libre y disfrutas de esa lbertda que sóo está en determindas islas que pese a estar habitadas por otros seres humanos, sólo ven barrotes en sus ventanas. Un abrazo
(27/05/2006 – 16:27) fernando@publicatuslibros.com

Antonio
Hola Fernando
Un buen amigo, hace ya bastante tiempo(cuando todavía manejábamos nuestras añoradas pesetas) me contó que en una despedida de soltero, el novio empapeló un billete de 5000 pesetas y se lo fumó. El dinero, en sí, no es malo. La forma de usarlo puede llegar a ser perversa, depravada… y de una total irresponsabilidad, como el caso que te cuento.
Por desgracia vivimos en una sociedad que prima el consumismo sobre todas las cosas. El peligro del consumismo es que no nos deja pensar por nosotros mismos. Como dice Alexandra Marínina en su libro "El sueño robado", la pereza mental es un vicio peligroso. Si pensar nos da pereza, nunca conseguiremos nada, acaso un arsenal de billetes sin sentimientos.
Que pases un buen fin de semana.
(27/05/2006 – 10:11) tonolimi@gmail.com