Fascista del siglo XXI

 

 

Mi NO pertenencia a ‘LA TRIBU’ o esa estructura social primitiva donde ejercer tu individual y necesaria relación paternofilial se cede ante el bien supremo del LÍDER/CHAMAN, me ha permitido que, aunque no los haya parido, JAMAS he permitido que nadie interfiriera en mi libre ejercicio individual y soberano de educar a mis dos hijos, transmitirle los mejores valores que puedo y sobre todo, colocarlos en su posición histórica y genealógica de pertenencia a esa otra estructura FASCISTA, llamada ‘familia’.

En la España del siglo XXI ya es un honor ser FASCISTA. Sí, lo soy. No gracias ni a DIOS, ni a la PATRIA, ni a la JUSTICIA, sino a mi LIBERTAD individual (única e intransferible) y la libertad que me enseñaron mis padres y mis abuelos, herederos y portadores de ese bien genealógico y social que es la familia.

Por ser un FASCISTA ejerciente he podido disfrutar de momentos como éstos y ningún LIDER SUPREMO/CHAMAN me los podrá ya robar.

Fascista del siglo XXI | Fernando R. Ortega | vagamundos